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¿Vamos a hacerlo realidad?
El IVDS cuenta con un conjunto de proyectos e iniciativas que están alineados con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, coordinada por Naciones Unidas. En este contexto, busca, a través de sus acciones, promover la protección de los bosques tropicales, especialmente la Amazonía, la Mata Atlántica y el Cerrado.
Otros componentes ambientales importantes que están en el radar del IVDS son los recursos hídricos y los ecosistemas acuáticos, tanto en aguas continentales como marinas. Por cierto, hemos trabajado en varias alianzas con miras a solucionar problemas relacionados con los corales invasores, como en el caso específico de CORAL-SOL (Tubastraea Coccinea y Tubastraea Tagusensis) y otros seres vivos que se mueven artificialmente, en cascos de barcos, por ejemplo, entre los diversos ecosistemas que causan daños a la vida marina local.
Imagen 1
Imagen 2
Imagen 3
Las imágenes 1 y 2 muestran CORAL-SOL, que a pesar de ser hermoso, es agresivo y destruye los corales naturales de la costa brasileña, por lo que causa daños destructivos a la vida marina. Originaria de Asia, es necesario contenerla. Las técnicas utilizadas actualmente para su contención son paliativas y terminan ampliando su propagación en el ecosistema marino brasileño. IVDS, junto con la empresa Tecno-Diver, tiene una solución eficaz al problema: el Sistema Subtec. Una tecnología sin precedentes que aspira y esteriliza el efecto diseminador de dicho coral. La Imagen 3 muestra parte del proceso de eliminación de corales invasores.
En este contexto, vale la pena recordar también los desafíos relacionados con los moluscos bivalvos invasores (mejillones) en represas y centrales hidroeléctricas en Brasil (lo que también ha ocurrido en aguas dulces en Europa), objetivo de los esfuerzos del Instituto para resolver el problema, en asociación con Techno-Diver. A continuación podéis ver una foto del típico mejillón de agua dulce.
Moluscos bivalvos – típicos de aguas dulces
Los proyectos IVDS avanzan en otros campos del conocimiento y en el enfrentamiento de desafíos socioambientales.
Es importante resaltar que el Cerrado o Sabana Brasileña, en su mayor parte, se ubica en la región Centro-Oeste de Brasil, en lugares considerados cunas de las aguas brasileñas, por su ubicación en regiones de meseta, como Águas Emendadas, en el Distrito Federal, el Parque Nacional Chapada dos Veadeiros y sus alrededores, entre otras áreas que ayudan en la formación de importantes cuencas fluviales como las cuencas del Amazonas y Tocantins, las cuencas del Paraná y São Francisco, que posibilitan la vida de importantes manantiales que sostienen el principales biomas brasileños como la Selva Amazónica, la Mata Atlántica, el propio Cerrado y la Caatinga.
El bioma Cerrado ha estado sufriendo graves daños ambientales como incendios ilegales y la expansión indiscriminada del cultivo de soja, amenazando estas fuentes de agua que alimentan las cuencas fluviales que sustentan los bosques tropicales.
Imagen de la Estación Biológica Águas Emendadas, Distrito Federal
No estamos en contra de una producción de soja que cumpla con las leyes ambientales y nuestros proyectos muestran la ventaja de diversificar el sistema de producción, con la implementación de propiedades multifuncionales y un alto nivel de biodiversidad productiva.
Es viable implementar soluciones productivas diversificadas: buenas para el medio ambiente y para el “bolsillo”.
Dentro de sus actividades, el IVDS ha trabajado para combatir la contaminación y el consumo insostenible, también en los biomas de la Amazonía, el Cerrado, la Caatinga y la Mata Atlántica y por eso se hace inevitable trabajar con las comunidades locales, en gran medida, carentes de saneamiento ambiental como: agua potable, recolección y tratamiento de aguas residuales, manejo de aguas pluviales, manejo sustentable de residuos sólidos.
Y también, actividades en el ámbito social, que promuevan el logro del hambre “cero”; la reducción de la desnutrición; reducción de las desigualdades sociales; producción y consumo sostenible de alimentos; la búsqueda de una salud única; la producción de energía limpia; Conservación de la Biodiversidad; la generación de trabajo e ingresos dignos; inclusión social productiva; la promoción, desarrollo e implementación de proyectos de producción agrícola de transición regenerativa y orgánica; desarrollo territorial local sostenible; en la reducción de las emisiones de carbono en los procesos de producción agrícola, industrial, de servicios y de vivienda. Acceso a una vivienda digna; a la salud integral: mente, sentimientos y cuerpo. La mejora de la logística que permita el tránsito seguro de personas, bienes y servicios, y la búsqueda continua de una economía cada vez más circular y sostenible.La vida humana está inmersa en el medio ambiente, por lo tanto, las comunidades y el medio ambiente están entrelazados en una relación biosistémica: inseparables, interactuantes e interinfluyentes.
A partir de estos principios e iniciativas, creemos que cada ciudadano puede contribuir al respeto y promoción de la VIDA en este Planeta finito, hogar de todos nosotros, que merece urgente protección y responsabilidad socioambiental. Algunos pueden aportar con poco y será mucho debido a la situación en la que se encuentran y a la grandeza de sus conciencias. Otros pueden aportar más y de la misma manera estaremos eternamente agradecidos y conscientes de la grandeza que representa su nivel de conciencia y responsabilidad socioambiental, en apoyo a nuestro trabajo incansable a favor de la VIDA humana y animal y de todo el medio ambiente terrestre.